Por Venancio Acosta Padrón
Ha sido costumbre entre los
herreños desde tiempo inmemorial, la celebración de la tafeña. El hecho tiene
lugar el día uno de noviembre y consiste en una reunión que en un principio era
familiar y que posteriormente y hasta la actualidad se hace más a nivel de la
comunidad.
El proceso se inicia con la
búsqueda de las primeras castañas que han madurado en los castañares herreños y
posteriormente el día de la tafeña se comen generalmente asadas, aunque también
puede ser guisadas, asimismo se aprovecha la ocasión para probar los vinos de
la cosecha del año correspondiente.
En la actualidad se suelen
celebrar tafeñas multitudinarias en diferentes lugares de la isla, siendo una
de las más importantes la celebrada en la Vinícola Insular, dentro de las
jornadas de la viña y el vino, se aprovecha la ocasión también para “catar” las
diferentes variedades de vino que se elaboran en la Isla.
Por ello, numerosos herreños por
estas fechas, además de probar las ricas castañas herreñas, se ocupan de
“catar”, los buenos vinos que se elaboran en la Isla.















La fiesta cuenta con gran arraigo entre los vecinos de los pueblos del norte de la Isla y consiste en una procesión que se inicia a las primeras horas de la mañana, participan el grupo de los bailarines del norte y asisten numerosos acompañantes, el recorrido se realiza por los antiguos caminos de herradura, algunos hoy transformados en carreteras, hasta llegar a la Iglesia de San Pedro en El Mocanal.
Tras una misa, la imagen retorna a su Santuario por un recorrido diferente, para llegar a las últimas horas de la tarde.
Se trata de una fiesta tradicional de la Isla de El Hierro, conservada a lo largo de muchas generaciones, y mantenida por devotos mayordomos, cargo que en las últimas décadas ha conservado la familia Lima de Erece.
El día 11 de octubre de 2011, se cumple el 63 aniversario de la salida del primer barco a vela que traslado emigrantes herreños, de una manera clandestina, desde la Isla de El Hierro a las costas de Venezuela. Avanzada la tarde de dicho día, finalmente se acercaba el velero a las costas herreñas y comenzaban las faenas de carga y embarque de los pasajeros en las inmediaciones de la punta de Ajones en la costa del pueblo de Isora y se iniciaba una larga odisea que llevaría a numerosos herreños a las costas de Venezuela, al pueblo de Carupano en el Oriente venezolano, tras internarse en las aguas del rio Orinoco.
Tras una larga noche de carga de los enseres al velero mediante pequeños botes, y agua del pozo de la Bonzanza en la cercana zona de Las Playas, al mediodía del 12 de octubre de 1948, zarpaba en medio de una inmensa calma, el “Saturnino” e iniciaba la aventura de atravesar el atlántico, el primer puerto que tocaron tras diez días de navegación fue el de Dakar, en Senegal. Tras cruzar el océano, en medio de numerosas penalidades, finalmente el “Saturnino” recalo en Cayena, la capital de la Guayana francesa, desde donde se desplazarían a Carupano donde llegaron el día 13 de diciembre, dos meses después de zarpar de la Isla de El Hierro.
En el “Saturnino” viajaron 52 emigrantes herreños, la mayoría del pueblo de Isora (26), de San Andrés fueron 14, de El Pinar 8, de La Villa 2 y de El Golfo también 2. La mayoría de estos pasajeros desconocían las penalidades que tendían que soportar, sólo se sumaron a aquel temeroso viaje con la idea de abandonar sus pueblos natales ante la pobreza y miseria que se estaba viviendo en aquellos años en la Isla, que estaba inmersa en una inmensa sequía, que se recordaría en el futuro como el “año de la Seca”.
Continuando con la comparación entre los dos documentos objeto de análisis, realizada por el profesor Behencourt Massieu, referente a terremotos del año 1793 en El Hierro, señala:
Buros aunque exceptico y optimista, procura sin embargo, nadar y guardar la ropa. A pesar de todo lo aseverado, no descarta por ello la posibilidad de que si la inminente erupción brotara en la misma cumbre sobre Sabinosa, tendría la lava el camino libre sobre El Golfo y el lugar del Pinar “en cuyo caso habría mucho perjuicio”.