Aeonium holochrysum

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domingo, 20 de marzo de 2016

El casino de Isora.

 Por Venancio Acosta Padrón

De centro social y de reunión a sede de la Reserva de la Biosfera.
Los casinos en la Isla de El Hierro, fueron durante muchas décadas el único lugar donde los herreños celebraban cualquier acontecimiento de carácter social, en ellos se celebraban las uniones matrimoniales, reuniones de vecinos, pero sin duda la mayor actividad de estas instituciones se centró en la realización de bailes, cada fin de semana, lo que supuso que la gran mayoría de las parejas comenzaran su relación en los casinos.
En el año 1925, se constituyó en el pueblo de Isora, una sociedad carácter recreativo, que llevaba por nombre “Centro Isorano”, que perduró durante más de cinco décadas, hasta mediada la década de años ochenta, en que estas sociedades dejaron de funcionar, debido a las nuevas modas y formas de divertirse la juventud herreña.
La constitución de estas sociedades llevaba aparejada la construcción de amplios edifcios, con salones donde debían celebrarse los bailes. La primera sede que tuvo el casino de Isora, fue una casa construida por el vecino D. Domingo Acosta Castañeda, donde permaneció unos pocos años, tras los cuales se trasladó a un edificio más amplio y moderno construido por el mismo vecino, donde de igual manera el casino permaneció durante un poco tiempo. Ambos locales tras el abandono de los casinos, se transformaron en escuelas, que por aquellos años comenzaban a funcionar en el pueblo.
El casino sería trasladado a una nueva casa más amplia y moderna, fabricada por otro vecino del pueblo, D. Higinio Morales, donde permaneció algo mas de una década.
Por el año 1955, un vecino que regresaba de Venezuela, D. Andrés Arteaga, propuso la construcción de un nuevo edificio para el casino, y poco después la sociedad se instalaba en dicho edificio, donde permaneció por espacio tres décadas. El traslado supuso una importante división entre los vecinos, que incluso llegaron a constituir una nueva sociedad, pero que nunca llego a funcionar.
Cuando se constituyó la sociedad “Centro Isorano”, el pueblo de Isora era de los más poblados de la Isla, y llegó a tener más de doscientos asociados. Eran años en que la vida de los herreños era eminentemente rural y con sus vecinos dedicados a la agricultura de secano, la ganadería y el pastoreo y el pueblo de Isora presentaba unas condiciones apropiadas para este modo de vida.
Debido a las  importantes sequías sufridas y las consecuencias en los pastos para el ganado y la consiguiente emigración a Venezuela, así como el cambio en los modos de vida con el traslado desde el medio rural a buscarse la vida en zonas urbanas el pueblo se fue despoblando, llegando a unos niveles mínimos en cuanto a su población.

Mediada la década de los ochenta los casinos dejaron de funcionar como la habían hecho hasta ese momento y tras un periodo de abandono, el edificio fue acertadamente adquirido por el Cabildo Insular con el fin de instalar en el la sede de la Reserva de la Biosfera, realizando una importante reforma del mismo y convirtiéndolo en la actualidad en una referencia para los herreños y visitantes, donde se pueden observar la evolución del modo de vida y las costumbres de los habitantes de El Hierro a lo largo del tiempo.