Aeonium holochrysum

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sábado, 29 de enero de 2011

Senderos de El Hierro. Camino de la Bajada o Camino de la Virgen.

Senderos de El Hierro. Camino de la Bajada o Camino de la Virgen.
Se da el nombre de Camino de la Bajada, al antiguo sendero que une la ermita de la Virgen de los Reyes, en la Dehesa comunal, con la Iglesia Matriz de la Concepción de la Villa de Valverde.
El nombre de se debe a que cada cuatro años transcurre por él la Bajada de la Virgen, una antigua y festiva procesión cuyo origen está en un Voto establecido por los herreños, allá por el año 1741, y que desde entonces se ha mantenido y cumplido estrictamente hasta la actualidad.
Se trata de un camino tradicional que históricamente han utilizado también los pastores herreños durante los desplazamientos de sus ganados entre diferentes zonas de la Isla, en busca de pastos.
Desde el punto de vista paisajístico, este camino que recorre la Isla de El Hierro, desde el extremo más occidental hasta el más oriental, atraviesa las cumbres de la Isla, desde donde se puede observar una esplendida vista de los diferentes paisajes que se van atravesando a lo largo del recorrido. Si hacemos un recorrido del de la ermita de la Virgen en La Dehesa hasta Valverde, atravesamos durante algunos metros unos terrenos comunales, que la historia ha sostenido para el uso y disfrute de todos los herreños, hasta llegar a una gran piedra en el centro de un rellano, Piedra de los Regidores, lugar de soporte de la Imagen de la Virgen en sus diferentes procesiones, tras dejar detrás la Piedra nos adentramos en una importante pendiente por la que ascendemos por las laderas del Cres, unos terrenos antaño comunales y desde la década de los cuarenta del siglo XX, propiedad de los vecinos de Sabinosa. Al final de la pendiente, en la Cruz del Humilladero, también elemento importante durante la Bajada de la Virgen, dejamos atrás los terrenos del cres, y pasamos de nuevo a terrenos de carácter público.
Con terrenos de una menor pendiente nos adentramos en los llanos de Vinto, y comenzamos a cruzar las crestas de la Isla, donde podemos observar a la derecha las magnificas vistas de las laderas del Julan y la costa sur de la isla y a la izquierda una esplendida panorámica del magestuoso Valle del Golfo. Tras cruzar lo alto de Malpaso, el punto más alto de la Isla, 1501 metros, descendemos a la cruz de los Reyes, aproximadamente a la mitad el recorrido, un lugar emblemático para los herreños, ya que en él se desarrolla uno de los ritos más emotivos de la Bajada de la Virgen. Tras abandonar la Cruz de los Reyes, continuamos por la cresta insular, llegamos al Pico de Tenerife o Tenerite, donde podemos observar a la derecha el Pinar herreño, un importante bosque de pino canario y a la izquierda comienza a aparece el bosque de fayal-brezal, producto de las continuas nubes que azotán la zona. Poco después en La Llania nos encontramos bajo e bosque de fayal-brezal que da paso al Bailadero de las Bruja y a la Hoya de Fileba, una de las tres calderas volcánicas que hay en la Isla. Tras abandonar la Mareta o las Asomadas, atravesamos la Meseta de Nisdafe, a través de los polvorientos caminos de El Jorado, llegamos al cruce de caminos denominado las Cuatro Esquinas, en las inmediaciones de San Andrés.
Poco después se inicia el descenso para tras atravesar el caserio de Tiñor llegar por medio de antiguos caminos de herradura a la Villa de Valverde.

lunes, 10 de enero de 2011

Senderos de El Hierro. Camino de Jinama.

Senderos de El Hierro. Camino de Jinama.
El antiguo camino de Jinama, desciende a través del acantilado que bordea el Valle de El Golfo, desde la Ermita de la Virgen de la Caridad, en la Meseta de Nisdafe, en el borde superior del acantilado, hasta el interior del propio Valle, teniendo su fin para los que descienden por el mismo en las inmediaciones de la Iglesia de la Candelaria.
Este antiguo camino de herradura fue utilizado desde antiguo fundamentalmente por los habitantes de los pueblos de la comarca de Azofa, Isora y San Andrés, para realizar las mudadas o cambios de domicilio tanto en la temporada de verano como en el invierno, hacia el Golfo, coincidiendo con las faenas agrícolas relacionadas con las viñas en el Golfo y la existencia de pastos para el ganado. Este antiguo camino de herradura fue durante siglos la más importante vía de acceso al Valle, por el eran trasladados todos los animales que se encontraban en los hogares familiares y era también la via de subida de las cosechas de vino del El Golfo, tanto para la exportación como para el consumo.
A lo largo del camino se encuentran numerosos puntos que dan fe del importante trasiego de personas que en otras épocas hacían uso de él. Quizá uno de los más importantes puntos sea “El Miradero”, un autentico mirador que se sitúa en un punto estratégico hacia la mitad del camino, desde el que se puede ver una extraordinaria panorámica del Valle del Golfo y desde donde los caminantes emitían voces y silbidos que avisaban a los familiares de que se acercaba algún miembro que esperaban.
A un nivel más alto de “El Miradero”, se encuentra la “Cueva de las pipas”, un entrante en la pared del acantilado, donde la naturaleza colocó una gran piedra que asemejaba a una gran barrica de vino. Poco más arriba se encuentran los “Roques de Guadarrama”, dos salientes a la vera del camino a los que da nombre un apellido común en El Hierro y a buen seguro que alguna anécdota de uno u otro signo le sucedió en las inmediaciones de este rogue, a algún miembro de la familia Guadarrama.
Si seguimos ascendiendo nos encontramos “Las Fuentitas, unos huecos en la pared donde en épocas pasadas se acumulaba el agua que era manada por aquellos húmedos riscos. Y finalmente justo en el inicio del camino se encuentra el imponente “Cuchillo de Jinama”, unos diques volcánicos que la erosión ha dejado al descubierto y sobresaliendo en el terreno.
Justo debajo de “El Miradero”, se encuentra el fabuloso “Hoyo de Tincos”, con una exuberante vegetación, lugar donde se pueden encontrar bonitos ejemplares de la más selecta flora herreña, justo encima del acantilado que bordea el camino se encuentra una fuente, que le da nombre según la leyenda el bimbache “Tincos”, uno de los últimos alzados tras la conquista de la Isla.
Si seguimos descendiendo nos encontramos con un altar donde antaño estuvo colocada una imagen de la Virgen, también una gran piedra situada en el centro del camino, donde estuvo colocada una cruz, nos señala el topónimo de “La Cruz del Fraile”, seguramente tuvo la zona alguna anécdota relacionada con algún fraile que transitaba por el lugar. También un mocan de grandes dimensiones da nombre a la zona el “Mocan de la sombra”, y finalmente antes de llegar a las primeras casas de Los Corchos, no encontramos con las “Vueltas del Pino”, donde la vegetación deja de ser tan tupida y empieza los campos de viñas.

sábado, 8 de enero de 2011

La Isla de El Hierro.


El Hierro, es la Isla más occidental del Archipiélago canario, en ella estuvo fijado el Meridiano Cero, ya que era considerada el final del mundo conocido, hasta que en la segunda mitad del siglo XIX, la intransigencia británica, más fuerte que el escaso interés manifestado por los españoles, lo colocaron en el barrio londinense de Greenwich. Recientemente en la zona donde se consideraba que estaba localizado el Meridiano 0, en las cercanías del Faro de Orchillas, ha sido construido un monumento en recuerdo del Meridiano 0.


Los primitivos habitantes de El Hierro, los Bimbaches, sucumbieron a la conquista que tuvo lugar en el año 1402, por parte del normando Jean de Bethencourth, el cual según parece apresó a los ingenuos habitantes de El Hierro y los traslado a tierras continentales para venderlos como esclavos.

La conquista definitiva no tuvo lugar hasta el año 1446, cuando la Isla fue vendida a los Condes de La Gomera y Señores de El Hierro, que tomaron posesión definitiva de sus posesiones, a partir de cuyo momento en la Isla se establecieron, muchos judíos, portugueses, castellanos, extremeños, etc. que mezclados con los bimbaches que quedaban, han dado lugar a la población actual de El Hierro.
La propiedad de los Condes de La Gomera y Señores de El Hierro, condujo a que se estableciera un sistema político de total dependencia, de los Señores, establecidos en La Gomera, pero que en El Hierro disponían de personas de su total confianza, compuesta por los nuevos integrantes de la población de El Hierro, que impusieron un sistema caciquil, con un sistema casi feudal, donde unas pocas familias disponían de la totalidad de la tierra de la isla y de los escasos medios de producción.

Esta situación se mantuvo hasta el siglo XX, donde los herreños que volvían de la emigración pudieron ir comprando los terrenos a los propietarios de siempre, residentes en la Villa capital de la Isla, lo que significo un cambio significativo en cuanto al modo de ejercer el poder en la Isla, de tal manera que hubo que esperar durante cinco siglos para que algún puesto de poder de carácter insular fuera desempeñado por alguien no residente en la Villa capital.